Extrañamente bien.

Fotografía por: Mirna Guadalupe Gloria Calderón


 Extrañamente bien


Mucho se ha escrito técnicamente sobre las personas que hemos sufrido bullying o acoso escolar a lo largo de la vida, que si la depresión, la ansiedad, que si la tristeza y la soledad,  trastornos de sueño y patrones de alimentación nada sanos, la pérdida de interés por la vida.

Hace tiempo logré observar en un fragmento audiovisual a una politóloga muy conocida en México comentar que "Sería bueno que todos viviéramos bullying, ya que es algo edificante, es algo que ayuda a hacer mejor a las personas, que nos hace fuertes". 

Desafortunadamente no coincido con estas palabras, si bien el bullying que llegué a sufrir en toda mi etapa infantil así como en la adolescencia y un poco en la etapa de adulto joven, me generó y dotó de algunas herramientas para la vida, a las que he sabido sacar provecho, también me dotó de trastornos y problemas espectaculares que me han costado más que mi paso por la vida misma.

Tuve la fortuna y el factor suerte de saber estructurar mi formación personal, académica y profesional para sacar provecho en la vida y que la misma no me consumiera de forma negativa, aunque con algo de tropiezos claro está y me ha costado trabajo. Sin embargo, adicional a mis circunstancias sociales en la etapa primaria de mi existencia, tuve la situación de crecer en un núcleo familiar un tanto disfuncional, así como con un sentido de carencias estructurales, económicas, circunstanciales y de tradición, con lo cual se vieron mermadas aun más ciertas habilidades que solemos edificar los seres humanos con el paso de los años.

Todas estas circunstancias, mal descritas o explicadas a groso modo, me hicieron crecer en un ambiente de supervivencia total, tanto en mí núcleo familiar, así como en la familia extendida y en el ámbito escolar, desde mi etapa en el área de maternal hasta preparatoria, tanto así que ahora, después de mucho trabajo personal, así como de análisis social he logrado entender la vida de manera diferente.

Fotografía por: Mirna Guadalupe Gloria Calderón

Saberme alejada de aquellos/aquellas personas y circunstancias que no edifican mi existencia, trabajar y abrazar mis etapas dentro de las distintas realidades de mi propia vida, todo esto claro, después de una gran inversión con los especialistas adecuados, tanto de tiempo como de dinero.

Tal es mi asombro ante mi propia existencia que, en ocasiones suelo tener esa sensación en la que suelo sentirme extrañamente bien, 

  • Extrañamente bien con mi proceso laboral y profesional. 
  • Extrañamente bien con mis circunstancias emocionales.
  • Extrañamente bien con mis procesos personales.
  • Extrañamente  bien con mi casa y mi vida.
Si bien dentro de mis procesos psicológicos, acompañada de los profesionales adecuados logré entrevistarme a mí misma y re-encontrarme con mi esencia, también conseguí varios insights que me permitieron entender que había vivido, por ejemplo, con ansiedad casi toda mi vida, y las consecuencias de esto se formaban en mi cuerpo físico también, entendí que muchas de las acciones que realizaba eran forma y consecuencia de mis propias circunstancias pero sobre todo del cómo veía o percibía estas circunstancias, todo esto normalizado a un grado espectacular que no me permitía percibir la vida de manera favorable en primera instancia y después ni lograr entender o diferenciar lo positivo de lo negativo, viviendo de una forma disfuncional pues. 

Dicho esto, pero por supuesto que sentirme bien iba a ser extraño, inclusive, hasta confuso, sentirme bien de manera funcional para mí misma y dentro de esta sociedad, es, verdaderamente extraño, para todos a mi alrededor y para mí misma.

Con esto no digo que mi introspección se ha terminado o que no necesito seguir descubriendo nuevas estrategias ante la vida, simple y sencillamente estoy un paso más en mi bienestar y mis objetivos, avanzando,.

Con esto hemos llegado al final de esta lectura, te agradezco la suscripción, y gracias por estar aquí, acompañándome, te espero a la próxima.

A continuación compartiré algunas ligas de interés sobre los temas que he abordado de manera personal:

 De: ALEJANDRO ROCAMORA BONILLA

Psiquiatra. Profesor en Centro de Humanización de la Salud. Exprofesor de Psicopatología en la Facultad de Psicología de la Universidad de Comillas

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